Hábitos

Se dice que el cerebro busca siempre los caminos para ser más eficiente, para no pensar más en lo que necesariamente se requiere y cuando detecta temas rutinarios, establece conexiones que reaccionan en automático sin implicar un proceso de toma de decisiones o de proceso mental.

Es así como funciona la práctica y los hábitos; un músico, un deportista, un cirujano, practican tantas veces los movimientos que luego los ejecutan sin pensar, en piloto automático.

Las rutinas son buenas para algunas cosas, peligrosas para otras. Son buenas para la creación de hábitos, para las tareas repetitivas, son veneno puro para los temas de creatividad.

Se dice que si haces una actividad durante 30 días seguidos, activas la macro, se crea el hábito, funciona para el deporte, lectura, levantarse temprano, etc. El detalle es que si interrumpes, luego se vuelve difícil retomar el tema, el mensaje que mandamos al cerebro es que el asunto no es relevante y convencerlo de volver al tema no es fácil, se muestra rejego, es donde entra lo que llamamos “fuerza de voluntad”, y nos lo llevamos arrastrando, manque no quiera.

En ocasiones vas a la oficina, ya sea en auto estándar o automático, pasas semáforos, vueltas, rotondas, llegas a la oficina, tu mente como copiloto dormido, te preguntas como llegue aquí, recuerdas poco a casi nada del trayecto, el auto que venía delante de ti, solo si ocurre algo extraordinario, como que alguien se te atravesó o casi te pega es que saliste del piloto automático y lo recuerdas, sino, lo poco que quedo en la memoria temporal, se desecha o se manda al archivo de cosas no importantes, quizá está ahí en algún lugar, pero acceder no se vuelve fácil, ninguna neurona quiere ir archivo muerto donde no las cajas están sin etiqueta.

Para algunas cosas son útiles, por ejemplo cuando estas buscando un archivo que hiciste y no recuerdas en que carpeta lo guardaste ni como lo nombraste, ó lo mismo cuando buscas un objeto perdido, ¿que se hace en esos casos?, replicas el proceso de pensamiento, como si lo fueras a hacer la primera vez, que nombre le pondría, donde lo guardaría…y tarán, lo encuentras, es casi mágico y tremendamente peligroso cuando quieres obtener resultados diferentes, tu mente te lleva una y otra vez al mismo lugar, como si dieras vueltas en círculos, es cuando se dice que “nos ciclamos”, por eso en los procesos siempre debe haber al menos dos personas: un elaborador y un revisor, porque una persona que se revise a si mismo hay una gran posibilidad que no encuentre sus propios errores, su mente le dará un paseo por el mismo proceso diciéndole que todo está bien.

Por ello los ejercicios de creatividad buscan dinámicas de romper la rutina, de hacerte pensar, pensar distinto a como tradicionalmente lo haces, las dinámicas como las de los 7 sombreros te obligan a analizar con varias perspectivas, por ello las sesiones de creatividad, innovación se sugieren fuera del lugar de trabajo, para incluso desde que te diriges a un lugar distinto a la oficina ya estás haciendo algo diferente, si es algo con vista verde, zona boscosa, cabañas, mejor.

Es importante entender como funciona la química cerebral cuando buscas sacar a tu cerebro de su zona de confort, lo obligas a hacer cosas nuevas, a liberar todo su potencial.

La parte negativa es que el cerebro no parece reconocer entre lo que le ayuda y le perjudica al cuerpo, ha de pensar que no es su problema, que es de otro departamento, la cuestión es que el tema de los hábitos funciona tanto para cosas que nos hacen bien como las que no nos hacen bien, así el hábito de no hacer ejercicio esta muy arraigado de días, meses y años de no hacerlo, cambiar esa programación es todo un reto, lo mismo pasa con la comida no saludable, buscamos los alimentos fáciles de conseguir, que no requieren preparación, una pasadita a la corner store antes de llegar a la oficina y listo, ya tienes café y panecito.

Tenemos que ser conscientes de nuestras fortalezas y debilidades, hay quien piensa que no tiene mucho sentido dedicarle tiempo a las debilidades pues tampoco te harás rock star en ellas de la noche a la mañana, en cambio seguir puliendo las fortalezas, brillarán tanto que tus debilidades quedarán opacadas, eso está bien cuando estas enfocado en las percepciones, pero cuando el que te importa eres tu mismo, al margen de la opinión de los demás, tus debilidades si importan y la mala noticia que no quieres oír ni escuchar es que si tienes que trabajar en ellas, es un most, tu pequeño secreto.

Conocerse a si mismo, como funciona tu cerebro, como funciona tus emociones en el tema emocional, te hará cada vez más consciente y dueño de lo que haces, del impacto que generan tus acciones y tus inacciones, no vayas en la vida en piloto automático, toma el volante de tu vida y podrás manejar a destinos que nunca te habrías imaginado.

Como siempre, sus aportaciones son útiles para mejorar estas reflexiones, en este caso, alrededor del tema de los hábitos y las buenas costumbres.

Que tengan una productiva y sanamente habituada semana.

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